Redacción por: Luis
Samayoa
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Cuando la
afición salvadoreña estaba más emocionada por el rendimiento del equipo, la
Selecta se quedó sin director técnico. Rubén Israel renunció a su cargo como
seleccionador nacional debido a diferencias con algunos periodistas deportivos
y el presidente del INDES, Jaime ‘la Chelona’ Rodríguez. Esto cae como balde de
agua fría tanto a la afición como a los jugadores; muchos ya se expresaron
lamentando la situación, reconociendo que estaban a gusto con el trabajo del
Profe Israel.
Israel llegó justo para enfrentar la Copa Oro en 2011. Poco más de
un año después, su ‘aventura’ finalizó. Con Israel, la Selecta ganó sus seis
primeros compromisos de la eliminatoria mundialista. También sacamos un punto
de oro en Costa Rica, rival directo, luego de ir perdiendo por 2-0. Su último
partido dirigido fue en el Estadio Cuscatlán ante México. La Selecta perdió 1-2
pero la imagen que dejó fue muy positiva. México nunca se sintió cómodo jugando
en ‘el Cusca’ y sudo sangre para sacar los 3 puntos de El Salvador.
Con Israel, la Selecta estuvo en el ranking FIFA más alto de su
historia, 49. Muchos jugadores emigraron al extranjero, particularmente a
Europa. Es el caso de Fito Zelaya que se fue a Segunda División en Rusia,
Arturo Álvarez en Primera División de Portugal, y el más reciente, Jaime Alas
al Rosenborg de la Primera División de Noruega.
Está claro que todo lo conseguido no fue por él principalmente
pero si tiene su crédito. También Israel ha cometido errores, como cualquier
otro.
Sus insultos a periodistas deportivos y funcionarios le salieron
caro. ‘La Chelona’, como presidente del INDES, decidió no pagar el mes de junio
al seleccionador nacional lo que provocó unos rifirrafes entre los dos. Israel,
que tenía el apoyo de la mayoría de la afición, renunció de una manera cobarde.
Sin dar la cara ante las FESFUT, y afición, voló hacia Uruguay y se despidió a
través de una carta dando a conocer su renuncia como Director Técnico de la
selección de El Salvador.
El jueves 12 de julio, dos días después de darse a conocer su
renuncia, Rubén Israel tomaba las riendas del Libertad de Paraguay, equipo de
la Primera División Paraguaya con quien ya había ganado un título de Liga. La
buena imagen que tenía ante parte de la afición se quebró. Su contratación por
otro equipo dos días después de renunciar pareció una obra planeada y la
afición se siente traicionada. Israel siempre, después de renunciar, habló bien
de El Salvador, equipo, pueblo y afición, pero sus recientes acciones muestran
lo contrario. Nos dejó de la peor manera posible.
He ahí el problema de la Selecta. El poder mediático que tienen, o
quieren tener, los dirigentes, periodistas y técnicos eclipsa a los jugadores
de la selección cuando son ellos los más importantes. El proceso que se venía
haciendo desde hace un año con Israel se rompe. Ahora habrá que adaptarse a las
ideas del nuevo técnico. Hay periodistas que juegan a ser técnicos y, a pesar
que su trabajo requiere de informar y opinar para bien o para mal, no dejan al
seleccionador, y técnicos en general, trabajar tranquilamente. Con tanta
presión y críticas, el trabajo del seleccionador ya no se disfruta y se vuelve
una pelea constante sin un ganador pero con un claro perdedor: la Selecta.
El sábado 14 de julio se dio a conocer el nuevo seleccionador de
la Selecta. Juan de Dios Castillo, mexicano, firmó contrato hasta diciembre
2013.
¿Cómo será la relación entre ‘la Chelona’, periodistas y
seleccionador? “Vaya usted a saber”.
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